|   | 1 | GUARDAME, oh Dios, porque en ti he confiado. |  | 
|   | 2 | Dijiste, oh alma mía, á Jehová: Tú eres el Señor: Mi bien á ti no aprovecha; |  | 
|   | 3 | Sino á los santos que están en la tierra, Y á los íntegros: toda mi afición en ellos. |  | 
|   | 4 | Multiplicaránse los dolores de aquellos que sirven diligentes á otro dios: No ofreceré yo sus libaciones de sangre, Ni en mis labios tomaré sus nombres. |  | 
|   | 5 | Jehová es la porción de mi parte y de mi copa; Tú sustentarás mi suerte. |  | 
|   | 6 | Las cuerdas me cayeron en lugares deleitosos, Y es hermosa la heredad que me ha tocado. |  | 
|   | 7 | Bendeciré á Jehová que me aconseja: Aun en las noches me enseñan mis riñones. |  | 
|   | 8 | A Jehová he puesto siempre delante de mí: Porque está á mi diestra no seré conmovido. |  | 
|   | 9 | Alegróse por tanto mi corazón, y se gozó mi gloria: También mi carne reposará segura. |  | 
|   | 10 | Porque no dejarás mi alma en el sepulcro; Ni permitirás que tu santo vea corrupción. |  | 
|   | 11 | Me mostrarás la senda de la vida: Hartura de alegrías hay con tu rostro; Deleites en tu diestra para siempre. |  |